Fundada por los españoles el 25 de julio de 1540, en la época colonial fue centro de esclavos africanos quienes llegaron a trabajar en las haciendas. Del mismo modo, pobladores de la sierra llegaron a Acarí para realizar labores agrícolas. Ahí juntaron sus costumbres con la población afro de la zona. “Cuántos de ellos conocieron a sus negras, Acarí es negro y cholo. Desde las serranías vienen cantando y bailando. Baja de tus montañas y ven a mi Acarí”, recita Domingo Díaz, investigador.

La ruta gastronómica no se hace esperar. Acarí es cuna de sabrosos potajes tomando como insumo la Caña brava. Una variedad de potajes a base de camarones provenientes del mismo río Acarí. Estas costumbres provienen de sus ancestros; tal y como la famosa carapulcra de camarones, las humitas, dulces y saladas y el arroz al olivo. Los dulces son verdaderas delicias; la mazamorra de lacayote, los yoyos, galletas de vainilla, piononos, bizcochos, chimangos y los alfajores.

Acarí es un distrito rico en tradiciones, que cuenta con un folclore propio y que vive con intensidad sus fiestas patronales, verbenas y fiestas patrias. Los negritos; Se llamaba así a quienes conformaban un grupo de características peculiares que hacía su aparición en la navidad. Sus inicios se pierden en los inicios de la colonia, cuando los hombres de color fueron traídos al Perú desde Cafre y otros pueblos del África, para los trabajos en las haciendas, en la minería y en los conventos.

Durante todas estas fiestas, luces de todos los colores inundan el pueblo. Desde el mes de noviembre (y hasta el día de Reyes), plazas, arboles y parques están iluminados con miles de lámparas que cumplen con los más estrictos requisitos de respeto al medio ambiente y eficiencia energética, iluminando más pero consumiendo menos. En estas fiestas hacen su aparicion los negritos que van bailando por las calles y visitando las casas donde se han montado nacimientos del niño Jesús.

En julio se celebra una de las fiestas patronales más significativas del pueblo en honor a Santiago Apostol, cuya historia se remonta a la época de la colonia. La municipalidad, se encarga de elaborar un programa repleto de actos que comienzan unas dos semanas antes de la festividad del patrón. La creciente importancia de estas fiestas dentro del panorama provincial ha hecho de Acarí punto de encuentro de multitud de pueblos vecinos que acuden a presenciar y participar de las fiestas patronales como unos acarinos más. Celebración del 25 al 30 de julio.

Toda actividad costumbrista que permanezca en el tiempo, y no sufra transformaciones ni modificaciones, como es la fiesta tradicional “ Pelea de Gallos” , y su protagonista el Gallo Navajero Peruano, creado en el Perú y único en el mundo, cultivada y arraigada en todas las regiones y pueblos del Perú, desde hace mas de 400 años, constituyen una Cultura tradicional y costumbrista del pueblo peruano. El acarino es aficionado a la crianza y peleas de gallos. la temporada los campeonatos de las peleas de gallos en Acarí es entre junio y julio en su coliseo Caballero Carmelo.